DREAMS ARE REAL.

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jueves, 5 de enero de 2012

"DREAMS ARE REAL" Capítulo 1.

   La brisa del mar chocaba contra mi cara, las olas se rompían en la orilla, las gaviotas chillaban, y el sol brillaba...Todo era fantásitco, hasta que sonó el teléfono, quien me puede llamar una mañana de Julio mientras tomaba el sol en las preciosas playas de Barcelona, vamos, el mismísimo  paraíso...Cogí el teléfono. Era Laura:
-¡Ereaaaaa!-empezó ha hablar tan rápido que se escuchaba la voz difuminada.
-Eh...que? Lo siento habla más despacio que no te entiendo.-dijé yo connfusa.
-Aver tontis...¿Te acuerdas de las cinco solicitudes que mandamos para la universidad de Oxford?
-Eh..si, ¿que pasó?
-Pues, !NOS HAN COGIDO TÍA! Dios no me lo creo todavía.-dijo como si la vida dependiera de ello.
-AAAAAAAAAAAAH! ¿Qué? Ahora mismo no sé que decir. Estoy estupefacta.-me había que dado pestañeando estaba tan sorprendida-. Lau tengo que dejarte que tengo otra llamada.
-Vale,¡nos vemos a la tarde! Besos.
 (otra llamada)
-¿Diga?-dijé con voz alegre.
-¿EREA?-era Henar, se había ido de compras con Marina y María al Corte Inlgés.- ¿Te has enterado?-dijo gritando como hizo Laura anteriormente.
-Desde luego que sí, me ha llamado ahora Laura y si me vierais ahora en la playa saltando como una niña pequeña no me reconoceríais.-no paraba de bailar, típico en nosotras.
-Chicas nuestro sueño poco a poco se esta haciendo realidad, esto lo llevabamos esperando desde pequeñas y creo que al fin todo esta dando un giro inesperado, es genial-. ahora hablaba María.
-Genial no, la bomba-. Estaba tan emocionada que seguro que la gente que estaba detrás pensaría que estoy loca, en parte lo estaba.
-Bueno tengo que colgar que si no Marina no para de gritar, besos. -Mientras se despedía se escuchaba por detrás a Marina y a Henar gritar desaforadamente.
    Estaba en shock, no sabía si lo que acababa de ocurrir era un sueño, o quizás los sueños podían hacerse realidad. Por mi cabeza pasaron mil pensamientos, no podía esperar más, cogí mis cosas y me fui de la playa. Llegué a casa y almorcé mientras aún, no daba crédito a la situación.
    A la tarde nos reunimos las cinco en un Starbucks, cuando nos vimos fuimos corriendo a abrazarnos. Estabamos preparadas para comernos el mundo, con 17 años, eramos unas grandes vividoras. Nos encantaban las fiestas, la playa, el verano, todo ese tipo de cosas, solo vivíamos la vida. En toda la tarde no paramos de hablar de lo que haríamos al llegar, la ropa que llevaríamos, si habría chicos interesantes, todo eso. Todas estabamos solteras, excepto María, estaba saliendo con Jorge, se conocían desde siempre pero creo que ahora no están pasando un buen momento y lo dejaron por bastante tiempo. Firmamos el documento de la solicitud, a Marina le temblaba la mano al firmar, debía de ser por los nervios. Estabamos a punto de comenzar una nueva aventura y lo que no sabíamos es que nuestra vida estaba a punto de cambiar, de una manera inesperada.
   Todas fuimos a junto de nuestra familia a contárselo, estaban tan orgullosos que hasta podíamos sentirlo de una manera especial. Partíamos hacia Londres mañana por la mañana y ni siquiera habíamos preparado nada. Fuimos corriendo al apartamento que teníamos alquilado para las cinco, y empezamos a meter ropa. Laura había metido no sé cuantos kilos de ropa, Henar había metido un montón de CDs, María todo tipo de productos de piel, maquillaje y eso, Marina metía fotos de la familia y su plancha, nunca se separaba de ella, yo además de todo eso, metí mi cámara de fotos, el objeto más preciado que tengo. Era una Reflex. Después de estar haciendo la maleta durante horas al fin acabamos y lo fuimos a celebrar a un restaurante. Fue magnífica esa noche.
    Al día siguiente.
Nuestras familias vinieron al aeropuerto a despedirse de nosotras y la madre de Laura casi la mata a besos a la pobre. Todas nos echamos a reír, era tan cómico. Y bueno al fin...estábamos a punto de despegar, si, a partir de aquí habría que cambiarse el chip español-inglés. Y así hicimos, El viaje fué largo, bueno no tanto como viajar a Australia, 2 horas y pico. Ya se divisaban las tierras británicas, y nos agarramos la mano, bueno yo estaba sentada con María y Henar, y Laura y Marina estaban atrás al lado de un señor, que no había parado de pedir bebida en todo el viaje. Empezaron a haber turbulencias, suele pasar al ir descendiendo. Cinco minutos después de esto, el avión tocó tierras inglesas. Llegáramos a nuestro destino. Esto era lo que habíamos deseado tanto, y ahora se había cumplido pero no sabíamos lo que no esperaba más adelante.

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